La Palabra del Señor Permanece para siempre
Septiembre es el mes de la Biblia. Biblia proviene del término griego “biblion” que significa los libros. Pero no es cualquier compilación de libros, sino que es la Palabra de Dios. Hoy, esta Palabra consuela al afligido, anima al decaído, perdona al angustiado y condena a que está en pecado.
Pues ustedes han nacido de nuevo, no de simiente perecedera, sino de simiente imperecedera, mediante la palabra de Dios que vive y permanece. Porque “todo mortal es como la hierba, y toda su gloria como la flor del campo; la hierba se seca y la flor se cae, pero la palabra del Señor permanece para siempre”. Y esta es la palabra que por el evangelio os ha sido anunciada.
(1º Pedro 1:23-25)
Así como el agua da vida en el desierto, el agua del Bautismo, en unión a la Palabra fue el que nos dio vida a nosotros. Hemos renacido. Estábamos muertos y hemos renacido en nuestro Bautismo. Y cada vez que oímos la Palabra, vuelve a renacer la esperanza dentro de nuestros corazones, salvo que cerremos nuestros oídos y nuestro corazón, rechazando así a Dios, su Palabra y el bautismo. Negar el Bautismo y a Cristo se llama apostasía. Quizá hoy la apostasía sea vista como un acto de valentía, o bien un “gesto” que el mundo aplauda, pero las consecuencias eternas de la apostasía son terribles:
“Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también lo negaré delante de mi Padre que está en los cielos” (Mateo 10:33)
¿Cuánto dura la floración de las plantas, en especial el yuyo del campo? Depende de qué clase de floración sea, si llueve o hay tormenta. Pero la flor dura un corto periodo. Observemos la siguiente descripción del ser humano que hace la palabra de Dios:
Porque «todo mortal es como la hierba, y toda su gloria como la flor del campo; la hierba se seca y la flor se cae, pero la palabra del Señor permanece para siempre. (1º Pedro 1:24-25 )
La Biblia usa aquí la floración de las plantas para describir a la vida terrenal. Tanto lo uno como lo otro dura un corto periodo. Es verdad, esta vida es corta. Pero ¿saben por qué consideramos corta a esta vida? Porque estamos cómodos aquí y no nos queremos ir. Pero cuando Dios lo disponga, nos iremos.